La genialidad de Benavides radica en la imitación al milímetro copiar las miradas, los gestos, las expresiones e incluso usar el mismo vocabulario con tal precisión y realismo que uno puede llegar a creer que los personajes a quienes imita lo imitan a él. La entrega total y la liberación que JB tiene con sus personajes lo llevan a ser una especie de camaleón, uno ya no tiene al frente a Benavides sino a la persona a quien imita en situaciones triviales que sacan del contexto al personaje para llevarlo al absurdo.
Aquí unas cuantas de sus más grandes imitaciones.
Benavides logra caracterizar el espíritu burlón y malicioso de la prensa de Magaly, haciendo que su personaje se desdoble en una demoníaca personalidad.
Espléndida imitación en la que no solo es idéntico el lenguaje corporal y la tonalidad de la voz sino que el lenguaje que utiliza es el mismo con el que Morosini se expresa.
Si a alguien se le ocurriese imitar a Rambo lo haría en una jungla asesinando a sus enemigos de manera brutal, pero Benavides decide llevarlo al plano de lo absurdo.
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